martes, 10 de febrero de 2015

Instante


¿Qué hay de la tristeza?
¿de su inutilidad?
¿Y qué?
Si me deja varada en una playa desierta por donde pasará jamás nadie.
¿Y qué?
Si algo me llama a esa orilla desolada en la que gemir por un instante,
lamentar la pérdida o la existencia,
morir a ratos, desesperarme, apagar.
Necesito inactividad, sinsentido.
No siempre soy buena, ni quiero serlo.
La maldad o la desgana también forman parte de la carrera
en la marcha atrás hacia lo inevitable, el principio.
Quietud, soledad, presencia.
La ola en lo más álgido, 
rugiendo imperiosa en la cúspide,
antes de caer entregada hacia la orilla,
se mantiene un segundo,
en silenciosa y absoluta calma,
en un instante eterno.
28/04/13

Ahora


Inapresables se van los momentos.
Llegan,
envolviéndolo todo de siempre.
Te dejan,
con el ladrido ausente de la fugacidad.

20-8-14

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Humo

No te marches.
Dejando tu rastro de recuerdos incandescentes.
Marcando la hora exacta desde la que volver a contar el tiempo,
renombrando todo lo conocido.
No te vayas.
No me dejes imaginarte, 
confundirte con el olvido o peor aún, 
soñarte.
No me hagas buscarte en los ojos del desconocido.
Quédate, 
aunque desaparezca 
la posibilidad remota de tenerte.

martes, 27 de abril de 2010

A veces vengo


A veces vengo en silencio y me siento un rato,

y escribo.

A veces pasan horas o días,

a veces han pasado años sin una sola palabra,

y cuando vengo reflexiono, observo,

pero callo esa mirada sobre el mundo,

que se esfuma en la noche y me olvido,

de venir a pensarme,

de pronunciarme en voz alta,

de elegir vestido para esta función.

Otras veces vengo y digo a manos llenas,

me oigo en pleno grito

y soy capaz

de hacer de una idea una forma que esté presente.

        (De 18-11-09)

El puzzle

“Tu vida real, es a menudo la vida que no llevas” Oscar Wilde


¿Hasta qué punto somos creadores de nuestra propia vida?

¿Somos conscientes de la libertad que tenemos de elegir oportunidades,

de ir en su búsqueda, de arriesgar, de imaginar otras vidas posibles,

de soñarlas y en definitiva, de construirlas?

¿Conocemos nuestras posibilidades y limitaciones?

¿Somos capaces de descartar y elegir opciones? y sobre todo,

¿qué es lo que nos empuja a quedarnos o a lanzarnos,

a esperar o a terminar con las cosas?

¿Somos espectadores o actores?

Cuando elegimos algo,

desechamos muchas otras posibilidades que quizá,

no volvamos a encontrar.

Pero hay que vivir una,

estar seguro o quererla con todas tus ganas

y aceptar donde te lleve, sea donde sea, esto es,

ser coherentes,

¿pero es ser felices?

supongo que quien no arriesga, nunca lo sabrá.

¿Y si no aparece la ocasión, sabríamos dibujarla?

Ya no es cuestión de encontrar, sino de imaginar y crear,

ser capaces de inventar un futuro y transformarlo en presente,

materializar lo soñado, atreverse a vivir.

(De 25-01-08)

domingo, 17 de febrero de 2008

Indiferencia


Colgada del orgullo,

demasiadas veces herida en lo más propio,

en mi ingenuidad, en mi buena fe.

Hoy me alzo intransigente ante todos,

ya está bien, de agachar la cabeza,

de ejercer la humildad,

de tragar las debilidades de los demás.

Sin miedo, sin demasiada conciencia, sin futuro,

hoy desisto de la racionalidad,

de la sana planificación, de la sensatez.

Cojo el barco que zarpa sin rumbo, hacia la soledad.

Indiferencia absoluta.

No mendigaré una sonrisa,

una bella palabra desde la distancia.

Hoy quiero izar una bandera en mi ego y reivindicarme.

Voy a quererme, a no ceder.

Esta vez,

no voy a pedir perdón.

domingo, 6 de enero de 2008

A flote


A veces te das cuenta de que no eres nada.

Un soplo de aire, una palabra,

pueden cambiarte el rumbo,

aunque sólo sea por unos instantes,

y te vuelves a preguntar "¿quién soy yo, dónde estoy?".

Qué delgada cuerda, la que me sujeta,

qué fácil es soltarla a veces,

cuánta fuerza hace falta entonces

para volver a agarrarla y seguir en pie.

Sólo es un estado de ánimo,

quizá el reflejo de una actitud cómoda,

querer apoyarme siempre en alguien,

que me sostenga cuando vaya a caer,

o la de la atracción al vacío,

sencillamente.

Aunque cierto es que hay un día después,

en que regreso guerrera y altiva,

dolida o sabia,

pero dispuesta a la lucha,

y doy grandes zancadas pasando sobre lo que sea,

y ese día,

voy por lo que quiero y lo alcanzo.

Pero todo esto,

sólo ocurre a veces....